Fernando se ha quedado de piedra al darse cuenta que se acostó con la amante del asesino de sus padres. Se pone como loco y no para de insultar a la mujer.
--¡¡calmate, Fernando¡¡ ¡¡deja que te explique¡¡
El guapo joven está enloquecido:
--¿¡¡¡qué me vas a explicar? ¡¡no eres más que una cualquiera¡¡ ¡¡¿te mandó Pineda a matarme pero antes quisiste coger conmigo ¡¡es que eres una especie de viuda negra¡¡??
Carla está seducida por Fernando, sus palabras no le ofenden. Le gusta acostarse con el chico pero le importa más lo que puede lograr con él. Habla muy tranquila. Es una mujer calculadora, sabe lo que quiere. Es como si no tuviera alma.
--Fernando, sientate y hablemos.
Fernando la mira con odio. Se lleva las manos a la cabeza:
--¡¡me das asco¡¡ ¡¡te odio, te odio¡¡ ¡¡¿¿como has podido acostarte con el asesino de tus padres? ¡¡¿¿o es que es mentira que los mató¡¡¿¿que quieres de mi? --dice Fernando que zarandea a Carla.
--primero lo que quiero es que te calmes, llevo mucho tiempo planeando esta venganza y no voy a permitir que un niñato la eche a perder, si eres tan impulsivo nunca lograrás nada.
Con un gran odio, Fernando dice:
--¡¡dime quien es el asesino de mis padres para matarlo¡¡
Carla le aplaude con ironía:
--perfecto, lo matas y tú en la cárcel ¡¡bonita venganza¡¡
--¡¡A mi me da igual lo que me pase, sólo quiero vengarme¡¡
Carla lo acaricia con deseo:
--me sorprende que un chico tan guapo como tú no valore la vida, que no haya nada que te guste y que no te importe destruirte.
Pablo se cruza por un momento por la mente del chico pero enseguida su odio lo domina:
--¡¡sólo quiero que me digas quien es tu amante y punto, tú dime y yo haré el resto¡¡
--No te lo diré ¡¡no así, no si no te calmas¡¡
--¡¡me das asco¡¡
--y es estupendo, yo también me daría asco si me detuviera a pensar pero Augusto Pineda es sólo un peón. Através de él podremos llegar al verdadero asesino de nuestros padres.
Y Fernando que tiene clavado en su mente la mirada de ese hombre dice:
--¡¡yo sólo quiero ver muerto al asesino¡¡
--pero es que a nuestros padres no lo mató un solo hombre, fueron toda una organización..Nadie se mete en la mafía y sale con vida.
--¡¡mis padres no eran unos maficiosos¡¡
--¡Así no llegaremos a ningún lado¡¡ ¡¡posiblemente ellos se dejaron seducir por el dinero fácil y no se dieron cuentan dónde se metieron¡¡ ¡¡por eso ellos están muertos y Augusto Pineda no¡¡
Fernando golpea con fuerza la pared:
--¡¡lo voy a matar lo voy a matar¡¡
Carla pega su cuerpo al de él:
--Fernando, yo quiero que se haga justificia.pero también quiero vivir..
Fernando se gira y la mira con rencor:
--¿¿porqué me buscaste?¿¿porqué?
--Yo no te busqué, en realidad me extraña que estes vivo...
--¡¡viniste a matarme, ¿no? ¡¡por eso me recogiste¡¡
--No... te recogí porque me encantaste y me quise acostar contigo.
Con mucho desprecio Fernando le dice:
--¡puta¡
--Si ya acabaste de insultarme hablemos. Fernando juntos lograremos muchas cosas, yo te puedo meter en su empresa y...
Fernando lo interrumpe:
--¡¡dime donde está y lo mato¡
--¡¡necesito de alguien que se gane su confianza¡
--¡¡yo sólo lo quiero matar¡¡
--así no se hacen las cosas.
--¡¡es que me quiero vengar¡¡
--¡¡¿y que mejor venganza que verlo destruido y muerto por la misma gente que ordenó que matar a nuestros padres¡¡? ¡¡es que además podremos acabar con toda la organización y después quedaremos libres para vivir la vida¡¡ ¡¡Fernando ¿no te gustaría ser feliz algún día?
Y Fernando no puede evitar acordarse de Pablo y sonreir enamorado:
--está bien, haremos las cosas como tu digas.
--Pues siéntate y cuentame todo lo que sabes. Necesito saber porque estás vivo.
Y Fernando no confía demasiado en esa mujer pero se da cuenta que es lo único que tiene para llevar a cabo lo que se ha impuesto. Y le cuenta la noche infernal, como esos viejitos lo salvaron. Y Carla, después de escucharlo con atención, dice:
--El maldito de Pineda debió hacer creer que te mataron a ti también porque sino no habria sobrevivido. Esos ancianos hicieron bien en darte una nueva identidad y esa debe ser la que uses. Nadie debe ver tu medalla¡¡nadie¡¡
Fernando se emociona al pensar en sus ancianos. Y Carla lo acaricia:
--tienes que ser fuerte y paciente. Nuestra lucha puede durar años pero saldremos adelante.
Tragándose sus lágrimas, Fernando le dice:
--¿¡cómo lo aguantas?¡ ¿¡como soportaste acostarte con esa bestia?¡
--La vida me endureció, sé lo que quiero, lo que merezco --lo mira pícara-- me entretengo con otras cosas.
Carla le quita la toalla que le permite contemplar de nuevo ese cuerpo que tanto le gusta. Le pellizca el trasero y fornican de nuevo. Fernando se convierte en un animal salvaje. No hay sentimientos. No hay culpa
Esa misma tarde, Fernando va en el auto de Carla. Llegan a la empresa de Pineda. Un gran odio se apodera de él.
--¿es aquí?
Carla hace que sí con la cabeza. Y ve en los ojos de Fernando el deseo de matar. Lo toma de las manos:
--por favor, contrólate.
--¡¡no sé si voy a poder¡¡ --dice el chico lleno de odio.
--Yo estaré a tu lado para apoyarte. Soy la secretaria de él.
--¿dime una cosa? ¿te has acostado con ese maldito?
Carla sonrie:
--es mi amante.
--pero digo ahora, después de estar conmigo.
--Fernando, no me hagas escenitas.
--no es una escena, trato de comprenderte.
--Hasta un hombre podereoso como Pineda tiene su punto débil. En la cama se logran muchas cosas, muchos secretos.
--¿y esperas que después de hacer el amor te confiese quien le mandó matar a nuestros padres?
--No pero gracias a eso sigo a su lado y averiguo muchas cosas. Pineda confia mucho en mi.Come de mi mano... hazme caso y todo saldrá bien.
Y los dos van entrando en la empresa.
--¿y si confia tanto en ti porque sólo es tu amante?
--porqué está casado y tiene una niña pequeña.
Y Fernando se ciega de nuevo por el odio. Carla se da cuenta y trata de calmarlo.
--hasta el peor de los asesinos tiene familia.
Y Fernando se topa de nuevo con esa mirada. Siente asco, ganas de matar, de vomitar al estar frente a frente al asesino de sus padres. Carla hace las presentaciones. Pineda y Fernando se dan las manos. Fernando lo mata con la mirada.
--¿le pasa algo al chico? --pregunta Pineda.
Y Carla tiene miedo que Fernando eche a perder sus planes. Desea ser la dueña de todo lo que tiene Pineda y más y no le importa usar a quien sea a su favor. No está dispuesta a un error.
--es que es su primer trabajo pero le echará ganas. Aprenderá --Carla.
Pineda le va explicando cuales serán sus obligaciones:
--si aprendes rápido puedes escalar rápido.
Fernando no puede más y mira la ventana. Piensa en que sería fácil dar un empujón a Pineda y acabar con él pero se mueve y así ve la foto de Pineda con su esposa y su hija adolescente. Son una familia feliz y a Fernando le da rabia que Pineda tenga una familia feliz cuando Pineda acabó con la suya. Y sonríe forzadamente:
--será un placer aprender de un empresario tan exitoso como usted.
Y Carla se da cuenta que Fernando está de su lado, a Pineda le ha caido bien el chico y Carla está segura que con la información que ambos le saquen logrará lo que pretende. Y Fernando se ha propuesto no sólo acabar con Pineda sino con su familia:
--¡¡los destruiré a todos, no permitiré que sean felices¡¡ --dice para si.
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